- La negra noche Neoliberal: recuperar al Estado
Una de las apuestas del actual gobierno es salir del modelo neoliberal y para ello se ven algunos pasos en firme, el principal, recuperar el rol del estado. Si el Estado es la máxima expresión política creada por la humanidad en la era moderna, en el cual se busca a través de un “contrato social” o acuerdo, encontrar el bien común. El neoliberalismo es el medio más idóneo para destruirlo, a través de mecanismos que garantizan el bien individual.
En los últimos 30 años el Ecuador ha sido testigo como, poco a poco el estado ha ido perdiendo su rol regulador, conductor y satisfactor de necesidades, dejando grandes vacíos que se expresan en un acelerado empobrecimiento de las poblaciones más vulnerables y el infame crecimiento de las arcas de unos cuantos. Esto ha sido posible a través de una serie de mecanismos de dudosa legalidad, que han llevado a que el estado abandone su rol y sea el mercado (léase empresarios), quién lo supla. Así en los actuales momentos son las empresas quienes controlan el mercado de la alimentación y por tanto responsables de la subida de los precios. Producto del modelo neoliberal, las empresas son las responsables de la comida y no el Estado. Son responsables también del empleo (tercerizadoras) y no el estado. Esto pretendían hacer con la seguridad social, la salud, la educación y las empresas estratégicas (teléfonos, agua, etc.). El lenguaje neoliberal a través de juegos semánticos buscaba equiparar la modernización con la privatización y así, que el mercado (léase empresarios) asuman el rol del Estado.
Pero, como dicen los abogados, hecha la ley hecha la trampa. El mismo modelo neoliberal ha diseñado la solución al problema y así, los vacíos dejados por el repliegue del Estado, han sido llenados por fundaciones (ONGs) de diversa índole. Estas fundaciones en los últimos 30 años cumplieron una parte del rol que el estado abandonó. Pero fueron más allá, fueron las responsables de llevar el capitalismo a lugares donde este no había podido llegar, nos referimos a los discursos y estrategias de desarrollo implementadas (micro créditos, micro empresas, cajas de ahorro, discurso de género, de servicios ambientales, etc) que profundizaron el modelo, legitimándolo y lo que es más grave, se volvió lenguaje cotidiano. En algunos lugares incluso convirtiendo al mercado como regulador de las relaciones sociales.
El actual gobierno busca en este sentido regularizar a las 19000 fundaciones existentes, dando muestra con ello de querer recuperar el rol perdido. De estas ONGs hay que diferenciar aquellas que reciben recursos de la cooperación internacional y aquellas que reciben recursos del estado (municipio, Consejos provinciales) para realizar obra pública que debía hacer el estado. Al parecer en algunas habrá intervención estatal, otras se cerrarán y otras seguirán, pero queda aún por ver la profundidad de estas decisiones. Algunas preguntas surgen al respecto ¿qué espera el gobierno con esta medida? ¿Qué pasaría con el dinero que la cooperación canaliza a través de las ONGs? ¿qué pasará con las capacidades, aprendizajes y desarrollos logrados por estos organismos y las miles de personas que trabajan en ellos?. En los actuales momentos el estado no tiene la capacidad para absorber la cantidad de trabajo que realizan estos organismos. Sin embargo la recuperación del rol del estado es algo que no se puede abandonar ni parar.
Parte de la recuperación del estado es toda una nueva institucionalidad diseñada en este gobierno, se han creado nuevos y más ministerios, nuevas sub secretarías, organismos de administración regional, etc. en definitiva este gobierno, no sólo que se ha propuesto desneoliberalizar el estado, sino también desconcentrarlo, que es una característica importante. Además pretende recuperar el rol del estado en la junta bancaria, en las corporaciones de desarrollo, en el banco central, etc. la principal característica de esta recuperación del rol del estado es la creación del SENPLADES, es decir el organismo de planificación del estado
Aún falta ver la profundidad de los cambios en la política económica, esa es una batalla aún no dada para desneolibaralizar esa parte de la política estatal. Parte de la “crisis de gobernabilidad” de estos 30 años, se expresó en la inestabilidad de los ministros, así alrededor de 400 ministros fueron parte de los últimos 7 gobiernos. Pero a pesar de tal movilidad y recambios, la política económica siguió intacta, era como si no importaba quine esté, los pilares neoliberales estaban sólidos. Ahí se nota la fortaleza del modelo neoliberal que se consolidó en instituciones y no en individuos, que se convirtieron en operarios. No se puede dejar de lado el papel de los multilaterales en todo este proceso.
Si al inicio del gobierno nos hicimos la pregunta ¿qué tipo de estado tenemos después de desneoliberalizar al país? Después de un año de gobierno, es obvio que será un estado capitalista, más moderno, menos salvaje, más social, pero capitalista. Pero además será muy particular pues, no será igual al estado de los 70 u 80, tampoco al de los 90, será otro Estado difícil aún de definir.